puede
simbolizar tu personalidad, o el lado de ti mismo que dejas ver al mundo.
Puede
simbolizar el cansancio, el letargo o la necesidad de unas vacaciones.
Puede
representar el deseo de escapar de las responsabilidades y preocupaciones
cotidianas.
Puede
representar una presentación de alguien que necesita conocer o reunirse.
Puede
representar la mitad de algo.
Puede representar energía creativa o ideas creativas que combinan ingredientes para crear algo nuevo.
Puede simbolizar darle fin a algún ciclo o patrón de comportamiento vicioso o autodestructivo.
Puede sugerir una forma de expresar y explorar de forma segura la ansiedad o el miedo de la vida de vigilia.