Puede
simbolizar el sentimiento de ira, resentimiento o amargura.
Puede simbolizar ira reprimida y sentimientos de rencor, victimización y amargura.
Pensar
que la persona que te gusta no actuaría fielmente contigo y luego salir y
participar tú mismo en un comportamiento cuestionable sugiere que puedes
encontrarte en una mala situación en un futuro próximo. Más concretamente,
apunta a acciones ilegales o poco éticas que podrían afectar negativamente a
tus relaciones con quienes te rodean. Sin embargo, darse cuenta de que esa otra
persona es usted en el sexo opuesto indica que está pasando por un periodo de
crecimiento y de búsqueda del alma que le devolverá el equilibrio a su vida y
le hará volver al buen camino, ayudándole a arreglar las relaciones dañadas en
el pasado y a fortalecerlas más que nunca.