-Si nos vemos contando monedas de escaso valor augura dificultades económicas.
-Si perdemos las monedas nos advierte sobre nuestra falta de economía.
-Si las encontramos refleja nuestro intimo deseo de emprender tareas más lucrativas.
Contar
monedas simboliza su frugalidad y su carácter práctico en materia financiera.
Eres eficiente en el manejo del dinero y en el mantenimiento de tu familia.
Acuñar
monedas o imaginarse a sí mismo prensando oro y plata en forma de moneda
sugiere que ha terminado recientemente un proyecto o completado una tarea que no
ha salido tan bien como se esperaba. Es probable que sus esfuerzos por volver
atrás y rehacer o corregir lo sucedido sean en vano, ya que ver este signo
predice que la finalización con éxito de este proyecto no está prevista.
Las
monedas nuevas, recién acuñadas, cuando se ven en una visión onírica,
simbolizan ganancias financieras inesperadas. Esto significa que es probable
que recibas algún dinero extra u otros bienes materiales de una persona o lugar
inusual o inesperado. Esto podría ser con la esperanza de que usted prometa
lealtad a una determinada causa o sin ninguna razón.
Examinar
o descubrir monedas antiguas, por ejemplo en un museo o en una colección
privada, suele interpretarse como una señal de que estás en o a punto de entrar
en un periodo de tiempo lleno de autorreflexión y descubrimiento, lo que
significa que estás reuniendo información y convirtiéndola en sabiduría. Esta
sabiduría puede ayudarle a encontrar el verdadero sentido de su vida o una
respuesta a la pregunta que más le preocupa. Lo que obtenga de este
conocimiento puede seguir ayudando a su desarrollo emocional y espiritual.
Dependiendo del tipo de vínculo que tengas con tu primo, verlo en tu sueño podría sugerir amor y afecto o revelar celos y resentimiento. Sin embargo, en combinación con el acto de moldear su mano, ...
-A una persona anuncia que un período difícil le va a poner a prueba. -Un objeto, sorpresa por un suceso que puede resultarle favorable.
Verse inspeccionando un altar de cerca para fijarse en sus detalles particulares es una advertencia de que está a punto de cometer un posible error de juicio que acabará lamentando.